Recientemente recibí uno de esos anexos que circulan por internet, siendo éste muy gráfico y claro del daño que a la naturaleza causan las bolsas plásticas. El sobrino que me lo envió me hacía la observación que la recomendación de llevar uno sus propias bolsas sin más explicaciones, dejaban sin que se comprendiera suficientemente la alternativa a no usar bolsas plásticas.
Hoy que EL NUEVO DIARIO está publicando artículos sobre la polución por las insoportables bolsas plástica, le envié de respuesta a mi ecologista sobrino otro punto de vista desde dónde enfocar la dificultad de estas luchas, y que deseo compartir con mis lectores. Esta vez A DOS MANOS.
Le dije: “las amas de casa entendemos la alternativa que muestra el mensaje, éste indica que: cuando vayamos al súper llevemos una bolsa de tela de algodón con asas (reciclable y orgánica), y en vez que nos empaquen en las innumerables bolsas plásticas, exigir que nos echen en la bolsa orgánica (de algodón) y a granel la mercadería comprada. Llenar una bolsa de compras no es tan fácil, tienes que poner en el fondo, o sea de primero, las latas y artículos pesados; luego los que están en cajas menos fuertes, después los lácteos que son generalmente empacados en bolsas (plásticas, ineludibles) y encima los tomates y perecederos suaves (todos empacados en plástico, no te las evitas). Los tomates pueden ir después de los huevos (en cajillas plásticas) y encima de todo el pan si es de molde (empacado en plástico)”.
He pensado mucho sobre el asunto porque yo soy biológicamente ecologista y sufro al ir de compras. Al pensar en la alternativa de la bolsa de algodón, no creí que me sirviera un sólo saco; porque para que me alcancen las compras de la semana el costal tiene que ser muy grande y pesado, y en uno chico no me alcanzan ni los frijoles.
Así que pienso me serían necesarias varias bolsas de algodón medianas y poner en cada uno el tipo de compras similares, y quizás puedas llevar a mano el litro de aceite (si lo dan en esas botellas con oreja también plásticas).
Total, que acepto las bolsas plásticas y luego acumulo cerca de un millón de ellas y se las doy a alguno de mis empleados que la venden a las recicladoras, que según el mensaje las recicladoras no tienen ganancias, pero aquí las compran. (Espero no me planten una huelga los “sindicatos” de recolectores de La Chureca).
Uso la broma ante la impotencia de no poder dejar de llenarme de plástico: el plástico viene con mi queso criollo, quesillo, arroz, azúcar, frijoles, galletas simples (soy diabética), queso americano, cuajadas, leches, jabón, jamón, pollo, pescado, carne de res, toallas sanitarias, papel higiénico, etc. etc. etc. ¡¡¡¡ TODOS EMPACADOS EN PLÁSTICO!!!!
Un día fui al mercado Israel Lewites y las marchantas me dieron todas las frutas empacadas en bolsas plásticas, una distinta para cada clase de fruta, sin atender mi petición que las pusieran en una sola. Entiendo que en el Palí no dan bolsas plásticas y tienes que llevar tu llevadero de cosas; pero como te digo, la mayor parte de las cosas vienen en contenedores plásticos.
Y si vas de tiendas, los varones suelen ir solos (jamás acompañan a las esposas y los comprendo) van por un objeto específico y lo encuentran rápido, lo pagan….. y se lo llevan en una bolsa plástica. Las damas vamos a varias tiendas, compramos de último lo que fuimos a comprar y de paso compramos otras chucherías que nos encantaron, cada una en una bolsita plástica. Generalmente metemos en la bolsa más grande las más pequeñas… todas de plástico.
Conste que si las compras las haces en una pulpería o en los mercados también te dan plástico, muchas veces ya usado, lo que es mejor ecológicamente. Si en vez de la ama de casa va la empleada de compras, sucede la misma inundación de bolsas plásticas.
Así que el remedio no es fácil; si Daniel pasara una ley contra las bolsas de plástico muchos pegarían el grito al cielo, pero sería mejor que andar matando partidos políticos.
En serio quisiera que se aprobaran leyes como las que han tomado países europeos sobre la prohibición de usar empaques plásticos. Esto obligaría a la industria alimenticia a empacar en material reciclable.
Pero acabo de acordarme además de las botellas plásticas del champú, enjuagues, talco, de los envases de desodorantes, maquillaje, y también de las gaseosas, agua; los licores ahora también en plásticos y hasta el vinagre es emplasticado. Uffff, que tarea tan difícil, y eso que es una sola de las muchas acciones que deberían tomarse para mejorar la salud del planeta al que tanto daño le hemos hecho.
Pero de gota en gota se hace el océano. Yo quiero seguir siendo esa gota que ayuda y no la bolsa plástica que se tragan las tortugas (las menciono porque es mi animal favorito).
Comencemos con las compras en bolsas de tela de algodón, y las medidas elementales de no botar basura donde no está indicado; barrer y recoger la basura que ha llegado a nuestra acera y reservarla junto con la nuestra para cuando pasa el camión recolector (que no se sabe cuándo va a pasar). Muchas más
acciones son posibles, como no tirar plásticos y vidrios en la costa durante esos deliciosos paseos al mar, o al río, o al lago o laguna; más bien recoger lo que otros irresponsables han regado.
Abrazos sobrino, y no te angusties, sólo da tu gotita de agua.
María Elsa Vogl Montealegre
Estimada Sra. María Elsa,
me llena de alegría leer este mensaje que envía a su sobrino, pienso que si los adultos dedicacemos un momento para explicar de esta manera tan sencilla estos temas importantes a nuestros menores, muchas cosas serían mejores en este mundo.
También comparto la preocupación con el tema de la basura, me siento muy responsable por el manejo de toda clase de residuos, en Nicaragua nos hace falta apreciar la naturaleza que tenemos y reconocer el valor económico que un buen manejo de la basura podría representar; por el momento me sumo a empezar por lo que está a mi alcance: reusar lo que se pueda y separar lo reciclable.
Me siento muy feliz de saber que hay muchas personas dando esa gotita para tener un mar de conciencia ambiental y me da entusiasmo para continuar con esta protección a través de un buen ejemplo.
Con muchas muestras de estima,